Sólo hay dos cosas mejores que cruzar la meta después de andar 100 kilómetros en 24 horas. Una es que tus padres, sin previo aviso, se presenten en la meta para verte llegar. La otra mejor es oir a tu propia madre gritando: ¡Bravo campeón!
Sólo hay una cosa que pueda decir: GRACIAS.
4 comentarios:
100 km duros, de esfuerzo, cansancio y dolor. 100 km para ver verte feliz como te mereces. Emotiva entrada David. ¡Gracias por compartirla! Un abrazo muy fuerte héroe.
Alberto: de nada.
Disfruta y sé feliz.
Sigo leyéndote aunque no suela comentar, pero es que lo de tu mami me ha llegao al alma, jejeje. Pues un besillo, campeón!! :)
Rocio: qué agradable saber que sigues por aquí. Se echan de menos tus creaciones. Mi mami es una santa y tiene el cielo ganado conmigo en todas sus reencarnaciones sólo por haberme tenido como hijo en esta vida. Significó muchísimo para mí que ellos estuvieran allí, por muchas y muy diversas razones.
Un beso, disfruta y sé feliz.
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